La presencia de efectos secundarios graves y persistentes provocados por el tratamiento de un problema estético genera gran preocupación para el clínico.

Cada vez hay más datos disponibles sobre el impacto de la finasterida en los trastornos sexuales y del estado de ánimo. Esta coexistencia de eventos adversos debe considerarse más bien como un síndrome distinto con su propia patogénesis que como una coexistencia aleatoria de signos. Los seguimientos posteriores a la comercialización sugirieron la posibilidad de síntomas persistentes después de la interrupción del medicamento, lo que se conoce como SPF. A pesar de la falta de pruebas definitivas, la presencia de efectos secundarios graves y persistentes provocados por el tratamiento de un problema estético genera gran preocupación para el clínico. Una baja prevalencia estimada de SPF no puede ser una excusa para la falta de vigilancia, ya que millones de personas relativamente jóvenes y sanas consumen el fármaco. El riesgo potencial de efectos adversos, incluida la duración del tratamiento, debe discutirse cuidadosamente con cada paciente antes del inicio del tratamiento.

Post-finasteride syndrome: Does it really exist? The Aging Male, January 16, 2019